Algunas empresas siguen considerando a las políticas de sostenibilidad como una amenaza para su negocio. Nada de eso. Con la nueva economía, las empresas pronto se darán cuenta de que integrar la sostenibilidad en su estrategia de negocios les ayudará a aprovechar las oportunidades, gestionar mejor los riesgos y aumentar su atractivo para la inversión extranjera. Al mismo tiempo, contribuirán a mejorar el medio ambiente y a crear una sociedad más justa.
Hemos examinado algunas de las preocupaciones más comunes de las empresas a la hora de integrar la sostenibilidad en sus estrategias. A raíz de ello, hemos analizado la realidad, basándonos en nuestra experiencia práctica.
- El costo. Algunas empresas se centran demasiado en el costo inicial de integrar la sostenibilidad en su estrategia empresarial, en términos de desarrollo de productos, evolución de los procesos existentes y medición de los nuevos resultados. Sin embargo, esto puede ser compensado fácilmente con el ahorro de costos, la reducción de riesgos (en las cadenas de suministro, por ejemplo) y una mayor eficiencia operativa.
- Gobierno corporativo. Si bien la redefinición de las políticas internas y la actualización de las estrategias de gobernanza pueden provocar cambios como la reestructuración de las responsabilidades de su equipo de liderazgo, y a veces las de su consejo de administración, la mejora de la gobernanza enviará una clara señal de la intención sostenible a largo plazo de su empresa. También será una ventaja competitiva de gran valor para atraer inversiones y motivar a los empleados actuales y a los nuevos.Para proporcionar más información, hemos elaborado “Una guía práctica sobre sostenibilidad para consejos de administración y equipos directivos", que ofrece orientación sobre el compromiso con la sostenibilidad.Evolución, no revolución. Para la mayoría de las empresas, la tarea no consiste en reinventar su propósito empresarial, sino en integrar la sostenibilidad en los objetivos existentes de la empresa. Sin embargo, no se trata de ser totalmente sostenible desde el primer día. Es más bien un viaje y no un destino.
- Por ello, uno de los retos más comunes es saber por dónde empezar y definir las prioridades a corto, mediano y largo plazo.La huella de carbono de su empresa y la reducción (o eliminación) de materiales y prácticas no sostenibles de su negocio, deben formar parte de una estrategia por etapas, que sea asumida por los grupos de interés internos de la empresa y los socios comerciales
- Mejor acercamiento a la nueva economía. La demanda de gestión de la sostenibilidad por parte de clientes, inversionistas y proveedores es cada vez mayor, por lo que integrarla en el centro de su estrategia empresarial, significa también satisfacer su demanda de productos y servicios sostenibles. También se ha demostrado que la sostenibilidad está relacionada con una percepción positiva de la marca. Podemos ver, por ejemplo, cómo podría ser beneficiosa para las medianas empresas que intentan conseguir contratos con gobiernos o empresas más grandes.El mayor riesgo es que las empresas se queden de brazos cruzados. Nuestra experiencia personal es que muchas empresas ya tienen muy avanzada su planificación empresarial.
En este mundo acelerado y en constante cambio en el que vivimos, la sostenibilidad ha pasado de ser un complemento que se percibía como "bonito" a un componente esencial para cualquier empresa, independientemente de su tamaño. Impulsados por un movimiento hacia el capitalismo de los grupos de interés y el reconocimiento de la importancia de crear valor a largo plazo, seguir actuando como siempre ya no es una opción. Ha llegado el momento de aprovechar los criterios ESG como una oportunidad, o de correr el riesgo de volverse irrelevante.
William Hughes
Consultor de Sostenibilidad Empresarial
